Juntos, podemos reducir el daño a la salud y al ambiente causado por la reutilización de envases vacíos de agroquímicos en zonas rurales.
Hemos evitado que 500 kg de envases vacíos sean enterrados, quemados o contaminen nuestros ríos.
La gestión inadecuada de envases vacíos de agroquímicos constituye un problema grave y extendido en las zonas rurales. Nuestras campañas de recolección de envases peligrosos de fitosanitarios se llevan a cabo mediante alianzas estratégicas con gestores autorizados. Esto permite reducir el impacto ambiental y social ocasionado por la disposición incorrecta de envases y la generación de plásticos, dos problemas que requieren atención urgente.



